7 de diciembre de 2020

ATENCIÓN SANITARIA A PERSONAS EN SITUACIÓN DE DEPENDENCIA

La atención sanitaria a personas en situación de dependencia es la atención específica que mantiene o mejora la autonomía, la relación con el entorno y la inclusión ocupacional.

Engloba los cuidados sanitarios y sociales que se ofrecen a las personas mayores, en situación de dependencia o con alguna enfermedad (crónica o no)

La persona que realiza este trabajo es un técnico sociosanitario que debe formarse como Técnico de atención a personas en situación de dependencia (TAPSD).  Es un módulo que forma y prepara a los estudiantes con el fin de atender a personas en situación de dependencia a domicilio o en instituciones. El objetivo principal es mantener o mejorar la calidad de vida de las personas atendidas mediante medidas específicas y normas de prevención y seguridad.



La población a la que se dirige el trabajo del técnico sociosanitario según la Dirección General de Planificación Sanitaria del Ministerio de Sanidad (2011) es: 

  • Enfermos geriátricos

  • Personas con algún problema de salud mental

  • Con diversidad funcional, en cuidados paliativos

  • Con enfermedad crónica y con dependencia funcional

  • En situación de precariedad social con algún problema de salud.


Los técnicos de atención sociosanitaria a personas en situación de dependencia cumplen 4 funciones principales (asistencial, educativa, rehabilitadora, socializadora):


ASISTENCIAL

Esta función implica el apoyo para la realización de las actividades de la vida diaria. Actividades que la persona realiza a diario y que le permiten ser autónoma e integrarse en su entorno. 

Pueden ser básicas (dirigidas al cuidado del cuerpo como la higiene, la alimentación, la movilidad...), instrumentales (relacionadas con el entorno como la preparación de comidas o el manejo de los temas financieros) o avanzadas (relacionadas con el estilo de vida y no son imprescindibles para la autonomía).

EDUCATIVA

Incluye las tareas de orientación, apoyo y formación para fomentar la realización de las actividades de la vida diaria. Destacan los hábitos de vida saludables y las habilidades y hábitos que promueven la autonomía.

REHABILITADORA

Se trata de mantener y recuperar las funciones y habilidades para realizar las actividades diarias y las cognitivas.

SOCIALIZADORA

Promover y mejorar las relaciones interpersonales favoreciendo la comunicación con las personas del entorno, generalmente mediante el acompañamiento. Algunas de estas actuaciones tendrán como objetivo mejorar los vínculos familiares o realizar alguna actividad sociocultural en la comunidad.




No hay comentarios:

Publicar un comentario